lunes, 31 de marzo de 2008

En Mis manos....

He aquí que en las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de Mí estarán siempre tus muros.
Isaías 49:16

domingo, 30 de marzo de 2008

¿Quién es Aquél?

¿Porqué dices, oh Jacob, y hablas tu, Israel: mi camino está escondido de Jehová y de mi Dios pasó mi juicio?.
¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la Tierra?. No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.
Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correran, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Isaías 40: 27 al 31

viernes, 28 de marzo de 2008

Espera en Él


... Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, y tome aliento vuestro corazón...
Salmos 31:24

¡No temas!

"Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, poqrue Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas".
Josué 1:9

jueves, 27 de marzo de 2008

¡Sigue cavando!


El médico escocés A. J. Cronin (1896-1981) se vio obligado a ausentarse de su práctica de la medicina por razones de salud. Entonces decidió escribir una novela. Pero cuando iba por la mitad, se descorazonó y tiró el manuscrito en el bote de la basura.

Totalmente decepcionado, Cronin se encontraba caminando por las tierras montañosas de Escocia y vio a un hombre cavando en un pantano tratando de sacarle el agua para usarlo como pasto. Cuando Cronin conversó con él, el hombre dijo: «Mi padre cavó en este pantano y nunca consiguió hacer pasto. Pero mi padre sabía, y yo lo sé también, que es sólo cavando que se consigue hacer pasto. Así que sigo cavando.»

Sintiéndose reprendido y motivado de nuevo, Cronin fue a su casa, sacó su manuscrito de la basura, y lo terminó. De esa novela, Hatter''s Castle [El castillo de Hatter], se vendieron tres millones de ejemplares. Cronin abandonó la práctica de la medicina y se convirtió en un escritor mundialmente famoso.

A veces, tú y yo podríamos sentirnos atrapados por circunstancias que exigen paciencia y persistencia. ¿Estamos dispuestos a seguir cavando cualquier «pantano» que Dios nos haya asignado?

El libro de Hebreos nos dice que tenemos «necesidad de paciencia» (10:36), y que debemos correr «con paciencia la carrera que tenemos por delante» (12:1). ¿Cómo? «Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe» (v.2). Con Cristo como ejemplo, ¡sigamos cavando!

miércoles, 19 de marzo de 2008

Las tres mujeres

Una hermosa historia cuenta de una cristiana que soñó con tres mujeres que estaban en oración.Mientras permanecían de rodillas, Jesús se les acercó.
Se acercó a la primera, se inclinó hacia ella con gracia y ternura, con una sonrisa llena de radiante amor y le habló con voz pura, dulce y musical. Apartándose de ella, se acercó a la segunda, pero solamente le puso la mano sobre la cabeza inclinada, y le dio una mirada de aprobación.Pasó junto a la tercera en forma casi abrupta; no se detuvo a hablarle, ni a mirarla.
La mujer, en su sueño, pensó: ¡Qué grande debe ser su amor por la primera! A la segunda le dio su aprobación sin las demostraciones de amor que le hizo a la primera; la tercera debe de haberle ofendido profundamente, porque Él no le dirigió una sola palabra y ni siquiera una mirada al pasar. ¿Qué habrá hecho, y por qué hizo tanta diferencia entre ellas? Mientras trataba de explicarse la acción del Señor, Él mismo se le acercó y le dijo:“— Mujer, ¡qué mal me has interpretado! La primera mujer necesita todo el peso de mi ternura y cuidado para poder afirmar el pie en el camino angosto. Ella necesita mi amor, mi interés y ayuda todo el día. Sin él, fallaría y caería.La segunda tiene una fe más fuerte y un amor más profundo, y puedo estar tranquilo porque confía en mi, no importa lo que haga la gente.
La tercera, que según tú no noté y aún descuidé, tiene una fe y un amor de la más fina calidad.A ella la preparo por medio de un proceso rápido y drástico para un servició sublime y santo.Ella me conoce tan íntimamente, y confía en mí hasta tal punto, que no depende de palabras ni de miradas ni de ninguna demostración externa de mi aprobación.No desmaya ni se desalienta ante ninguna de las circunstancias por las que la hago pasar. Confía en mí aun cuando el sentido, la razón y los instintos más finos del corazón natural se rebelarían.
Sabe que estoy trabajando en ella para la eternidad, y aunque lo que hago no se lo explica ahora, lo entenderá después.Callo en mi amor, porque amo más que lo que las palabras pueden expresar, o el corazón humano puede entender. Callo por amor a ti, para que aprendas a amarme y a confiar en mí en respuesta espontánea y espiritual a mi amor, sin que ningún estímulo externo pida tal respuesta.

¡¿A dónde huiría de Tí, Padre?!

¿A dónde me iré de Tu Espíritu?, ¿y a dónde huiré de Tu Presencia?.
Si subiere a los cielos, allí estas Tú; y si en el Seol hiciere mi estrado,
he aquí, allí Tu estás.
Salmos 139: 7 al 8