lunes, 16 de junio de 2008

CRISTO YO CREO EN TI


Aún sin poder tu Santo rostro contemplar,
y aunque Tu trono arriba en los cielos lejos parace estar.
Aún sin poder le herida de tus manos tocar,
hay en mi alma un gozo profundo que hace mi fe vibrar.
Cristo yo creo en Tí,
yo siempre creeré en Tí.
Aunque no puede verte Señor,
Eres real en mi corazón.
Cristo yo creo en Tí,
Por siempre creeré en Tí.
Aunque se nigue el mundo a creer,
no dejaré mi gozo perder. Yo creo en Tí.
Enviado del cielo,
eres Aquel escojido por Dios,
Eres El unico y cierto camino hasta Su corazón.
Moriste en la cruz,
resucitaste y hoy vives en mí.
Venciste al pecado y la muerte, ¡y ahora soy libre al fin!
¡Oh! ¡Creo en Tí, creo en Tí, Señor!
Cristo yo creo en Tí - Crystal Lewis

domingo, 15 de junio de 2008

¡Confía en Mí!

Jehová te dice: ¡¡Confía en Mí!!
Comienza a andar,
no quieras ver
todo está bien,
conozco el camino.
Deja el temor,
ya estuve aquí
por estos valles
de oscuras calles sin final;
y aunque oscuras estén...
Confía en Mí,
aunque no puedas ver,
ven, confía en Mí,
si es difícil seguir,
ven, confía en Mí.
Te guiaré; confía en Mí.
Comienza a mirar,
mas no sueltes Mi mano.
Cambia en risa tu llorar,
mira el gozo en tu pesar.
No desesperes,
a Mi lado a salvo estás.
estaré siempre contigo,
de Mi mano no caerás;
por debil que estés...
Confía en Mí,
aunque no puedas ver
ven, confía en Mí,
si es dificil seguir
ven, confía en Mí.
Te guiaré; confía en Mí.
Sí, yo sé lo que está en frente de tí,
no siempre claro está.
Más, en tu interior debes creer
que estoy aquí, que estoy aquí!!!

Confía en Mí - Crystal Lewis




sábado, 14 de junio de 2008

No se dormirá el que te guarda


Alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro?.
Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra.
No dará tu pie al resbaladero; ni se dormirá el que te guarda.
He aquí, no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel.
Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
Salmos 121:1 al 5

viernes, 6 de junio de 2008

Mujer virtuosa

Mujer virtuosa, ¿quién la hallará?
Porque su estima sobrepasa largamente a de las piedras preciosas.
El corazón de su marido está en ella confiado, y no carecerá de ganancias.
Le da ella el bien y no mal, todos los días de su vida.
Busca lana y lino, ycon su voluntad trabaja con sus manos.
Es como nave de mercader; trae su pan de lejos.
Se levanta aun de noche y da comida a su familia, y ración a sus criadas.
Condidera la heredad, y la compra, y planta viña del fruto de sus manos.
Ciñe de fuerza sus lomos y esfuerza sus brazos.
Ve que van bien sus negocios; su lámpara no se apaga de noche.
Aplica su mano al huso, y sus manos a la rueca.
Alarga su mano al pobre, y extendie sus manos al menesteroso.
No tiene temor de la nieve por su familia,
Porque toda su familia está vestida de ropas de dobles.
Ella se hace tapices; de lino fino y púrura es su vestido.
Su marido es conocido en las puertas, cuando se sienta con los ancianos de la tierra.
Hace telas y vende, y da cintas al mercader.
Fuerza y honor son su vestidura; y se rié de lo por venir.
Abre su boca con sabiduría, y la ley de clemencia está en su lengua.
Considera los caminos de su casa, y no come el pan de balde.
Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada, y su marido tambíen la alaba.
Muchas mujeres hicieron el bien; mas tú sobrepasas a todas.
Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, ésa será alabada.
Dadle del fruto de sus manos, y alábenla en las puertas de sus hechos.
Proverbios 31: 10 al 31

miércoles, 4 de junio de 2008

A Tí sea la gloria


No existen más motivos Señor,
venimos hoy rendidos a Tí,
la única razón de nuestra adoración
hoy eres Tú.
Elevamos olor fragante para Tí,
para Tí.
Solo a Tí sea la gloria Señor,
la alabanza y la adoración.
Toda rodilla se doble,
ante el único Rey y Dios.
Solo a Tí sea la gloria Señor,
alabanza y la adoración.
Que toda lengua confiese,
que Tú eres el Señor.
A Tí sea la gloria - Abel Zavala

martes, 3 de junio de 2008

...El que ha de venir, vendrá...

No perdáis, pues, vuestra confianza,
que tiene grande galardón;
porque os es necesaria la paciencia,
para que habiendo hecho la voluntad de Dios,
obtengáis la promesa.
Porque aún un poquito,
Y el que ha de venir vendrá, y no tardará.
Mas el justo vivirá por fe;
Y si retrocediere, no agradará a mi alma.
Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición,
sino de los que tienen fe para preservación del alma.
Hebreos 10: 35 al 39